Obviamente todos han hablado de la muerte del Papa, probablemente es la noticia que más cobertura ha tenido en el último tiempo. En fin... finalmente pasó. Hace unos días atrás comentaba con una amiga lo fuerte que sería su muerte. En realidad, cuando me enteré. lo tomé desde una perspectiva que no había considerado, es decir, recibir la noticia con tranquilidad y con alegria. ¿Alegria? Sí, alegría. Porque él fue un hombre santo, y como tal, lo único que espera es ese momento para encontrarse con su Amado Padre, por lo mismo, ¿cómo no me voy a alegrar que ya haya alcanzado la Vida Eterna?
Fue un gran valor, así que dificil será olvidarlo. Ahora se viene un nuevo tiempo, y roguemos para que el nuevo Papa que asuma, pueda seguir con esta tarea de Amor y Solidaridad que Juan Pablo II instauró. Por algo se ganó el respecto de todo el mundo y de todos los sectores religiosos...
1 comment:
Buen comentario, aún yo no compartiendo la doctrina del pápa, sentí tristeza por su muerte, toda mi vida había oído hablar de él, de manera que de mi persona tiene mi respeto y reconociento.
Saludos....... te seguiré.
Visítame.
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